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Gas radón en la casa: herramientas de medición, riesgos para la salud y sistemas para reducir los niveles de gas radón en el hogar.
Los niveles delgas radónse pueden controlar y reducir tanto en viviendas nuevas como en viviendas existentes. Desafortunadamente, en Italia no existen disposiciones legales. Para las primeras referencias regulatorias tendremos que esperar hasta 2018 cuando nuestro país se verá obligado a implementar laDirectiva europea 59/2013.
El daño a la salud delgas radónse conocen desde el siglo XVI, cuando se observó un aumento de enfermedades pulmonares entre los trabajadores más expuestos a esta sustancia.
Gas radón en la casa
losradónllega a la nuestrahogareslevantándose del suelo según unprincipioconocido comoefecto chimenea. El efecto chimenea es el mismo mecanismo que utilizan los arquitectos para asegurar una buena ventilación natural en los edificios y está dictado por la diferencia de presión entre el entorno interno del edificio y el exterior.
En el interior de las viviendas, la presión es mayor, especialmente en invierno cuando las temperaturas exteriores son más bajas y más altas en el interior debido a la actividad de los sistemas de calefacción. Esta pendiente recuerda la entrada de aire en el interior del edificio y con ella penetra también en elradónque exhala desde el subsuelo hacia ambientes residenciales.
losradónpasa por las microgrietas en los pisos, paredes y por las tuberías de gas y electricidad, desde el sistema de alcantarillado ...
Cómo reducir los niveles de gas radón en el hogar
Entre los medios que tenemos para bajar los niveles de gas radón en ambientes cerrados, mencionamos los sistemas de ventilación mecánica controlada con sistema de filtración de densidad (el radón tiene una densidad mayor que el aire y es mucho más pesado que cualquier otro gas conocido). La aspiración natural (ventilación natural o intercambio de aire) es una buena solución para edificios preexistentes, pero en el caso de propiedades de alto riesgo donde los propietarios desean intervenir de manera específica, pueden confiar en ingenieros expertos en técnicas de remediación.
Enhogaresde obra nueva es más fácil intervenir: durante la fase de diseño es posible identificar la clase de riesgo de los suelos de cimentación y realizar los trabajos de aislamiento adecuados. En esta etapa, los costos a afrontar son mínimos, estamos hablando de una incidencia del 0.05% sobre el costo total de construcción. La medición de niveles deradónen el suelo lo realizan geólogos y siguiendo la legislación checoslovaca (pendiente de la italiana). La prospección se realiza en el suelo, a unos 80 cm de profundidad. El aire se aspira a la fuerza del suelo y se transporta a una cámara de medición. Este paso preliminar devuelve una indicación del riesgo potencial asociado con los niveles deradóndetectados y, sobre la base de estos, se pueden tomar las precauciones de construcción necesarias.
Mide los niveles de radón
La concentración deradón puede variar mucho de un momento del día a otro y está fuertemente influenciado por la saturación del suelo en caso de lluvia, nieve, velocidad del viento, movimientos sísmicos ... Por estos motivos, no es fácil realizar mediciones absolutas . No faltan en el mercado instrumentos que permitan medir los niveles de radón en casa o en espacios abiertos, pero estos dispositivos son difíciles de manejar precisamente por las fluctuaciones en las concentraciones de este gas.
Entre los instrumentos destacamos algunos kits que pueden funcionar un "número de veces" o dispositivos de detección con pantalla digital. Los kits pueden ser bastante fiables pero obligan al usuario a comprar siempre material nuevo para poder realizar un número adecuado de encuestas. Solo a modo de ejemplo, recomendamos un monitor de lectura de nivel de gas radón fácil de usar. Tiene sensores sensibles a las fluctuaciones del radón para realizar mediciones a largo plazo. Es fácil de usar y la información recopilada se proyecta en la pantalla LCD. El dispositivo no es nada barato: cuesta alrededor de 240 euros.